martes, 18 de febrero de 2014

PEQUEÑA LECCION

Al realizar gestiones de mi familia en Mollendo, recordaba que de muy pequeño iba con mi señor padre a las instituciones públicas y privadas a efectuar esos trámites de siempre.  Incite a tener más de un tertulia con los ciudadanos que estábamos en la espera de ser atendidos.

En esos momentos  tuve la grata sorpresa de encontrarme con una dama octogenaria correligionaria acérrima seguidora del partido Acción Popular, la que se ganó los mayores de mis respetos, porque fui testigo en aquellos años  de los  debates que tenía con opositor que se presentaba al partido de la lampa.

Tuve el agrado de verla y presentarle mis cordiales saludos.  Agradezco a personas como ella, si bien no comparto sus mismos ideales políticos, pero la tuve como escuela de vida, porque hasta para criticar una gestión municipal hay que ser digno y no utilizar adjetivos calificativos ni mancillar el nombre de una persona y mucho menos denigrar a nadie. Asimismo más de un funcionario y trabajador municipal seguidor de la lampa, debería escucharla porque algunos han perdido la brújula y están delirando de poder.